Las Conferencias Interamericanas son el más importante foro regional sobre políticas de vivienda, financiamiento habitacional y gestión urbana que UNIAPRAVI celebra desde hace 57 años, que a su vez constituye una gran oportunidad para departir y establecer vínculos con altos ejecutivos y directores de entidades financieras, empresarios desarrolladores y constructores, organismos internacionales, instituciones académicas y gremiales, así como con representantes de entidades rectoras de vivienda y urbanismo de gobiernos centrales, regionales y locales de diversos países de América Latina y el Caribe.
Se estima que el déficit habitacional en América Latina y el Caribe es cerca de 55 millones viviendas, del cual el 70% sería déficit cualitativo, mientras que el 30% sería déficit cuantitativo. La crisis sanitaria generada por el COVID 19, afecta las economías de nuestros países en diversos sectores, la región tuvo una contracción económica entorno al 7% en 2020, una recuperación en 2021 de 6.9%, y se estima un crecimiento de 2.3% en 2022.
Los impactos en el corto y mediano plazo se trasladan a las familias mediante caída del consumo e inversión privada, y en incremento del desempleo afectando los ingresos y capacidad de pago de las familias, que además conllevaría a un aumento de la informalidad y precariedad de la vivienda, acentuándose así el déficit habitacional.
Los actores públicos y privados han venido implementando diversas estrategias, programas y mecanismos frente al Covid -19 y contrarrestar los efectos negativos en la economía que afecta a las familias. Asimismo, se ha acelerado la digitalización e innovación financiera, se ha institucionalizado el trabajo remoto, se ha intensificado las estrategias de sostenibilidad ambiental, económica y social, entre otros factores que conllevan a nuevos retos entorno a la reactivación económica y financiamiento de la vivienda.
El sector de vivienda residencial tiene un impacto directo en el sector de la construcción cerca del 6% del PBI en la región, siendo así un motor generador de empleo, por el alto efecto multiplicador en la economía, asimismo con la provisión de viviendas adecuadas contribuye a mejorar las condiciones sociales y calidad de vida de los hogares principalmente de poblaciones vulnerables, facilitando el acceso a servicios básicos, agua, electricidad, saneamiento, conectividad, acceso a servicios educativos, zonas de comercio, recreación entre otros, en línea al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), y compromisos de la Nueva Agenda Urbana (NAU).
El rol del sector privado resulta crucial, considerando las limitaciones fiscales que presentan los países en la Región, para la movilización de recursos e inversión destinados a la producción y financiamiento de vivienda adecuada. Si bien los subsidios o subvenciones del Estado son importantes, resulta necesario fomentar el dinamismo del mercado de la vivienda con mejores condiciones para las familias, con créditos accesibles en tasas y plazos, una oferta disponible con precios y costos de transacción acordes a las necesidades de vivienda para todos los segmentos de población.
Bajo este contexto, resulta relevante, generar un dialogo entre actores del sector público y privado para conocer las proyecciones económicas globales y regionales, así como las nuevas tendencias e innovaciones tecnológicas y del financiamiento sostenible, analizar los programas, experiencias exitosas y políticas de vivienda para dinamizar el mercado de vivienda, encontrar sinergias y acciones conjuntas que coadyuven a impulsar el financiamiento y producción de vivienda adecuada.